Jaime Salinas (Foto: http://www.andina.com.pe), ex candidato a presidente de Perú en la elección del 2006, dio una conferencia sobre su campaña política y el rol de la prensa.
La conferencia, bajo la coordinación de la profesora María Elena Polack y con la participación del decano Gustavo Martínez Pandiani, se realizó el 17 de agosto en la Facultad de Ciencias de la Educación y de la Comunicación Social de la Universidad del Salvador.
Siendo el conductor de un programa llamado Con Justicia para Todos, Salinas aportó su perspectiva sobre la función de medios de la comunicación. “Los medios tienen la obligación constitucional, ética y moral de informar. Con objetividad y con equidad. Para que todos los ciudadanos puedan formar una opinión clara, objetiva y transparente de cuáles son las diferentes propuestas de los candidatos”, explicó.
Analizó también la situación de Perú: “...ante una crisis económica latente, ante un copamiento del poder a través de una dictadura por parte de Fujimori y su mafia la prensa empezó a distorsionar la función objetiva de informar, y la reemplazó con la función subjetiva de vender información”.
En cuanto a la elección pasada, no guardó las críticas. Dijo que no hubo una cobertura objetiva de las propuestas de los otros candidatos sino que hubo simplemente una cobertura de quien puede pagar más. “Las encuestas en mi país, también fueron compradas por la dictadura y hasta el día de hoy siguen siendo manipuladas”, agregó.
Tras su discurso, Salinas recibió varias preguntas de los alumnos. Cuestionaron sobre la influencia de Hugo Chavez y la actuación de Dick Morris en la última elección y, el posible cambio o solución ante la corrupción que vive el país. El político peruano hizo hicapié en la necesidad de una educación “en valores del éxito y del mérito” y de mayor regulación sobre la publicidad que el estado maneja en los medios de comunicación. Luego aclaró su posición política como un espacio de outsider. “Porque esa es la respuesta de un gobierno frustrado y sobre todo, a mi criterio la diferencia no es tanto de quien está más a la izquierda o más a la derecha”, justificó.
Jaime Salinas y su retórica
Además de ser un empresario privado y un presidente del partido político, Salinas fue un gran orador. A través de sus gestos y su voz firme se mostró convencido de su habla y trató de trasmitir la confianza al oyente. Inició su discurso con unas palabras de un periodista cubano que fue uno de los fundadores del diario más antiguo de Perú, llamado El Comercio. “El periodismo puede ser la más noble de las profesiones o el más vil de los oficios”, citó. Fue suficiente como para ganar la atención de todos los futuros comunicadores.
Durante toda la charla, explicó con muchos ejemplos y nunca perdió el respeto hacia el público. Antes de terminar, compartió una reflexión que aprendió en la cárcel a través de un libro del filósofo argentino José Ingenieros: “Si en la vida aspiran a ser águilas vuelen alto y aspiren a ver lejos. Pero si se resignan a ser un gusano perderán el derecho a reclamar cuando los pisen”.“Estoy convencido de que todos ustedes, futuros profesionales, están decididos a ser águilas y los invito a que miren alto y miren lejos”, concluyó.
1 comentario:
Lo que me gusta de los políticos es la capacidad expresiva. Pero a medida que sea poético y bello su discurso, suena como algo ideal, ajeno a la realidad. Allí pierdo la confianza y los veo como aquellos oradores que buscan sólo la persuación, no el compromiso.
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